lunes, 28 de febrero de 2011

Las madres están mal

Publicado en Diario de Mallorca el 28/2/2011

LOS CHICOS ESTAN BIEN

Nacionalidad: Estados Unidos, 99 min. Director: Lisa Chodolenko. Actores: Annette Bening, Julianne Moore, Mark Ruffalo, Mia Wasikowska

Unos adultos de mediana edad con parejita de hijos adolescentes. La joven, al cumplir 18 años, quiere conocer a su padre biológico. La novedad de Los chicos están bien arranca de a partir de ahí: Los dos vástagos son fruto del mismo donante. Y sus respectivas madres son una pareja de lesbianas. Tampoco ese giro focal se puede calificar de originalísimo. Pero es una excusa suficientemente sólida para hacer un retrato, en clave cómica, de una familia en crisis.

El mensaje es muy simple, quizás demasiado. A familia poco convencional, apuros clásicos: Crisis de la mediana edad, presíndrome del nido vacío y cuernos. Papeles muy marcados en la pareja adulta. Nic/Annette Bennig es el macho, proveedor de sustento y vigía de que los vástagos crezcan por el buen camino. Jules/Julianne Moore es la hembra, insegura, indecisa y más emotiva. Es un equilibrio perfecto pero no inamovible. Paul/Mark Ruffalo, un pequeño empresario plácido y ligoncete, lo hace saltar por los aires. La siguiente incertidumbre es si los promotores del filme optan por la brocha gorda (Los padres de ella y chiquicientas secuelas) o el rotring fino.

Segunda opción, gracias al altísimo. El guión rezuma ternura y autenticidad. Se nota, y agradece que esté escrito por un hombre y una mujer (Lisa Chodolenko y Stuart Blumberg). No hay feminismo ni machismo encubiertos. Hay un gag antológico y una sonrisa permanente el resto del filme, a pesar de la previsibilidad del desenlace. La dirección es correcta, potenciando la luz estival y dejando hacer a los actores. Acertadísimo reparto. Soberbios los dos nominados al Oscar, Bening y Ruffalo; al mismo nivel Julianne Moore. Con historia completamente diferente, Los chicos están bien recuerda a Pequeña Miss Sunshine por su modestia, vitalidad y optimista defensa de las familias atípicas.

miércoles, 23 de febrero de 2011

Augurios y pálpitos

Publicado en el Suplemento Bellver de Diario de Mallorca el 24/2/2011

Oscars 2011 (previo). Dentro de pocos días se fallarán los premios de la academia norteamericana de cine. Los Oscars, en cristiano patrio. Hacer quinielas es tan placentero como intrascendente; las predicciones valen tanto como los mapas meteorológicos. Los resultados dependen de la multiplicación de corrientes objetivas, remanentes subjetivos y permeabilidad a los vientos mediáticos o la disimulada presión de los aspirantes (Penélope Cruz, verbigracia, debe su estatuilla al sibilino don de gentes del productor Harvey Weinstein). Como el cine es entretenimiento, juguemos a las conjeturas:

Película. Astuta jugada, el año pasado, de multiplicar como panes las candidatas, para despistar a los augures. La red social se ha inflado con los Globos de Oro y desinflado con las nominaciones de la Academia. El discurso del rey es la opción más conservadora, The fighter y El cisne negro las tapadas; el resto, pura claque.

Director. Alta probabilidad de que repita el ganador de la categoría anterior (Hopper o Fincher). No certeza, como ocurrió, mismamente, el año pasado. Extraña la ausencia de Cristopher Nolan (Origen).

Actor protagonista. El río va tan crecido a favor de Colin Firth que es muy improbable que dé un requiebro. Altísimo nivel de todos los seleccionados. La nominación de Bardem le ayudará a mantener la exposición mediática, y el caché, en tierras yanquis.

Actriz protagonista. El Globo de Oro a Natalie Portman puede ser un indicio fiable. Veteranas como Nicole Kidman o Annette Bening al improbable quite.

Actor secundario. Ya va siendo hora de que se reconozca el inmenso talento de Christian Bale. Geoffrey Rush está a su lado, con la mano lista para sisarle el dulce. Jeremy Renner, Mark Ruffalo y John Hawkes concurren en la subcategoría de convidados de piedra.

Actriz secundaria. Aquí sí que está reñidísima la pugna. Yo se lo daría ex aequo a Melissa Leo (The fighter) y Jackie Weaver (Animal kingdom). Amy Adams es más que una promesa y lo acabará demostrando. Incluso puede que este año.

Guión original y adaptado. Categorías convertidas en premios de consolación. La ética pide un detalle con los Cohen por su valiente remake de un western de Henry Hataway (Valor de Ley) y La red social por su acertado retrato psicológico del fundador de Facebook.

Toy Story 3 ha logrado que unos juguetes animados compitan por la mejor película del año. El premio en su categoría está firmado y sellado. Para mejor película extranjera compite la coespañola Biutiful. Un pálpito me sugiere que el premio podría caer en Grecia por la original y desasosegante Canino.

Sensación de justicia

Publicado en Diario de Mallorca el 23/2/2011

SIN RETORNO

Nacionalidad: Argentina, España 102 min. Director: Miguel Cohan. Actores: Leonardo Sbaraglia, Martin Slipak, Federico Luppi, Bárbara Goenaga

Tras curtirse como ayudante de Marcelo Piñeyro, Miguel Cohan salta a la dirección con un guión escrito a medias con su hermana. Sin retorno trata el espinoso tema de los accidentes de tráfico con fuga del infractor. Es una historia menos sórdida que la de Carancho pero con caldo de cultivo similar: el sálvese quien pueda colectivo, remanente de la dictadura y sostenido por posteriores crisis y gobiernos ineficaces.

El planteamiento de la película es algo enrevesado: un doble atropello a la misma víctima. Eso provoca dos sospechosos de homicidio, un padre clamando justicia y unos sistemas policial y judicial que ceden, por comodidad o saturación, al linchamiento prematuro de los medios de comunicación. Prima la sensación de justicia frente a la justicia sin matices. Los sentimientos de los protagonistas son muy fáciles de compartir. Las consecuencias de algunos actos, demasiado obvias. La tensión está en si se impondrá la venganza del inocente o los remordimientos del culpable, y qué papel jugará el tercero en discordia. El desenlace es impecable, lo mejor de la película. El desarrollo es excesivamente complejo (el director ha reconocido que el argumento daba para una serie de tv), con algunos cabos sueltos y dos largos saltos temporales que, aunque necesarios, distancian un poco al espectador.

La realización es efectiva, sin ningún alarde. En el reparto, al más inexperto (Slipak) le toca el papel más difícil y lo salva con un aprobado justo. A Sbaraglia y Luppi les sobra talento y oficio, dejando la duda de si podrían haber dado más. Goenaga no puede rascar nada de su plano personaje. Sin retorno es un mejorable, pero interesante por el tema, drama.

domingo, 20 de febrero de 2011

La danzarina oscura

Publicado en Diario de Mallorca el 21/2/2011

CISNE NEGRO

Nacionalidad: Estados Unidos, 110 min. Director: Darren Aronofsky. Actores: Natalie Portman, Vincent Cassel, Lila Kunis, Barbara Hershey

Cisne negro trata la delgadísima frontera entre éxito y fracaso; el estrés mayúculo que reciben los practicantes de algunas disciplinas, la influencia dudosa de los padres (vease Jorge Lorenzo); el peaje sexual (sutil o descarado, voluntario o cuasi forzoso) que afrontan a veces las chicas ante el escalón definitivo; la dicotomía talento innato-fortaleza mental, concentrarse en la vocación para dar el máximo o disfrutar la vida para sobrellevar mejor la presión; su desamparo cuando llega el declive.

Todos estos temas se explayan sobre el telón del ballet clásico. Son similares, aunque con ambientación diametralmente opuesta, a los del anterior filme de Aronofsky (El luchador, con Mickey Rourke). En Cisne negro el director ha ido más lejos, dándole un toque de El caballero oscuro, Shine o Una mente maravillosa. Giro loable por ambicioso, que evita la previsibilidad de su rival El discurso del rey, pero lo asoma al precipicio del melodrama y la tragedia forzada. Es un tercer acto en la cuerda floja y sin red, que puede chirriar y disgustar a algunos espectadores. El acierto o no de ese desenlace y el acartonamiento de tramas y personajes secundarios (la madre, la bailarina rival) son discutibles. No lo es la realización e intrepretaciones. El ligero virado a azul de la fotografía y la steady cam aportan desasosiego. La actuación de Natalie Portman es excelsa. A la complejidad psicológica y el reto de emular a una bailarina se añade que en buena parte del filme tiene la cámara a menos de un palmo del rostro, obligándola a darlo todo y más. Gran nivel también de Cassel, Kunis y Herschey. Cisne negro no deja indiferente; por poco que atraiga el tema merece ser vista.

viernes, 18 de febrero de 2011

Lazos de sangre

Publicado en Diario de Mallorca el 18/2/2011

WINTER'S BONE

Nacionalidad: Estados Unidos 100 min. Director: Debra Granik. Actores: Jennifer Lawrence, Dale Dickey, John Hawke

Dentro del cajón de sastre que es el cine independiente americano se están produciendo excelentes dramas rurales, que sólo llegan aquí cuando son bendecidos por los Oscars. Winter's bone está nominada a cuatro importantes: mejor película, actriz protagonista, actor secundario y guión adaptado. Los cuatro muy merecidos.

La novela de Daniel Woodrell va de crímenes rurales en la América profunda. Una adolescente lucha por salvar su hogar familiar en el que debe cuidar, sin ingresos, a su deprimida madre y a sus dos hermanos menores. Para que no embarguen la casa debe encontrar a su padre, recién salido de la cárcel. Y al buscarlo se topa con una despiadada banda de delincuentes. Sobre esa intimidante base, la directora Debra Granik añade un atinado toque femenino que aumenta el realismo. En toda la primera parte la protagonista va pasando de casa a casa, hablando con mujeres y algún hombre, haciendo caso omiso a los avisos de que no se meta en líos. Poco a poco se va acercando a una asentada banda de delincuentes, protegida por lazos familiares, chantajes, deudas y una poderosa ley del silencio. Camarilla en la que las mujeres tienen una participación igual de activa que los hombres, pero también rescoldos de humanidad. La fotografía del filme acentúa el naturalismo (me ha recordado a Frozen river). El reparto es otro acierto. El aniñado y atractivo rostro de Jennifer Lawrence aumenta su sensación de desamparo. John Hawkes también va de menos a más como el drogadicto tío de la chica.

Winter's bone es un intenso drama, que refleja cómo la pobreza degenera en egoísmo y delincuencia no sólo en los núcleos urbanos.

miércoles, 16 de febrero de 2011

Besando el culo de San Pedro

Publicado en el suplemento Bellver de Diario de Mallorca el 17/2/2011

NOSOTROS, LOS AHOGADOS
Carsten Jensen
Traducción de J.M. Mendizabal Sarasua
Ediciones Salamandra, 698 pags.

NARRATIVA. “Una orquesta tocaba todos los días la misma melodía frente a nuestra ventana. No le pusimos nombre. Pero estaba en todas partes. Hasta en la cama. Cuando dormíamos, soñábamos con el mar. Las mujeres, sin embargo, no oían la melodía. Tenían que quedarse en casa y llenar los huecos que dejábamos. Nosotros oíamos las sirenas. Ellas se tapaban los oídos y se inclinaban sobre la colada.”

Nosotros, los ahogados narra la vida de la localidad costera danesa de Marstal entre 1848 y 1945. Sucesos reales salteados en forma de ficción. Personajes verídicos con sus linajes barajados. Relato en la primera persona del título; difusa (se nota que el autor no ha leído Pedro Páramo) aunque compensada por la fuerza de las voces, el tono sostenido de la saga marinera.

Arranca con una batalla naval: el conflicto entre daneses y alemanes de hace siglo y medio en la que un marinero, Laurids Madsen, sale disparado hacia el aire por la explosión en su nave y cae desde diez metros de altura de pie, sobre sus botas. Vio a San Pedro pero éste no le enseñó más que el culo. Cierra con otro cuasi milagro: el rescate por parte del nieto adoptivo de Laurids de un bebé alumbrado instantes antes de que su barco fuera hundido por un submarino alemán durante la II Guerra Mundial.

Entre medias un repaso del auge y declive de la localidad costera. Dilema macroexistencial: vivir de cara al mar les trae empleo y riqueza, a cambio de muertes y soledad de las mujeres. Cuando una mujer toma el poder y gira la compás hacia el interior, regresa la pobreza, rematada por la guerra.

Relato ameno, reforzado con un puñado largo de imagenes imborrables: la cabeza disecada de James Cook obtenida por Madsen de un negrero del Pacífico; las premoniciones por su hijo Albert de naufragios y muertes en la Primera Guerra Mundial, su estúpida muerte atascado en el barro con las pesadas botas de su padre en una noche de invierno, congelándose de pie sobre un palmo de agua; la angustia de su hijo adoptivo ante las luces rojas de los naúfragos aliados que los mercantes tenían prohibido rescatar...

Nosotros, los ahogados es una obra muy ambiciosa, intensa, de firme pulso narrativo, casi magistral. Imprescindible para los amantes de literatura náutica o de aventuras.



Tiro al blanco

Publicado en Diario de Mallorca el 17/2/2011

VALOR DE LEY

Nacionalidad: Estados Unidos 110 min. Director: Joel y Ethan Coen. Actores: Jeff Bridges, Hailee Steinfeld, Matt Damon, Josh Brolin

Si con Ladykillers los hermanos Coen se atrevieron a resucitar un clásico de los Estudios Ealing y cotejar a Tom Hanks con Alec Guiness, en Valor de ley desafían a un peso pesado de su género, Henry Hathaway y retan a Jeff Bridges a que iguale al mítico John Wayne en la interpretación que le valió su único Oscar. ¿Capricho o acierto? ¿Por qué han elegido precisamente esa película?

La elección no es casual. En la historia y los personajes se aprecian una constante con filmes anteriores de la fraternal pareja: la provocadora inverosimilitud. Exigen sumisión en ese aspecto y ofrecen a cambio su pulida receta de humor negro, diálogos afilados, encuadres insólitos e implicación total de los actores. El argumento narra el improbable menaje de una rencorosa niñata (Steinfeld), un torpe cazarrecompensas (Damon) y un inescrupuloso y borrachuzo alguacil (Bridges) en busca de un escurridizo delincuente. Lo mejor y lo peor de los directores se aprecia en una subtrama: en un momento dado Bridges intenta curar a Damon arrancándole la lengua; en secuencias posteriores Damon habla como si apenas tuviera una llaga en la boca. Más humor cáustico en la escena del patíbulo, los encuentros en la choza, el del río con la chica y el fugitivo, o el regateo con el comerciante. Trillado el encuentro con la serpiente. Muy emotiva la cabalgada nocturna final. Soberbio Jeff Bridges; repelente, como debe ser, la chica; desubicado Damon, coloristas, otra marca de la casa, el corro de secundarios.

Valor de ley no se acerca, ni aparenta pretenderlo, a las obras maestras de John Ford. Aclarado eso, es una película imprescindible para los fans de los hermanos Coen, e interesante para los nostálgicos del género.

martes, 15 de febrero de 2011

El señor de los panecillos (negros)

Publicado en Diario de Mallorca el 15/2/2011

PREMIOS GOYA 2011

Hace unos días Nadal Suau me recordaba por qué la escena inicial de Pa negre resume la película entera: Los actos perversos tienen siempre ramificaciones que escapan al control de su autor. Es la acción-reacción intrínseca de los mejores dramas. La clave, la fuerza, el tema que Agustí Villaronga ha sabido pulir y rematar. Merecidísimo su éxito, incuestionables todas las estatuillas, que quedarán ahí, en el palmarés histórico, cuando haya pasado el ruido de la verbenera trifulca entre el presidente del gremio, la ministra del ramo y los pendencieros internautas.

Sainete bienvenido como acción-reacción a la inmovilista anemia de años anteriores. Como la crisis del ladrillo, todo el mundo barruntaba la de nuestro séptimo arte y a todos les ha pillado por sorpresa: Producir más de cien películas al año implica estrenar dos a la semana; los exhibidores son remisos a poner más de dos al mes. Los espectadores españoles son crueles con nuestro cine y fieles a las series televisivas. ¿Por que son gratis? El cine español perdió su identidad hace décadas, cuando Internet era poco más que un fax entre militares y universitarios yanquis. Se dispersó en favor de una libertad y pluralidad que nadie supo amalgamar y fidelizar. Los éxitos en años recientes mostraban un paisaje con resonadas cimas (Almodóvar, Amenábar, Torrente), puntuales despuntes (Alatriste, Mortadelo, Celda 211) y un inmenso y triste páramo. El cine de terror es una salida tan digna como limitada por los corsés del género. Las subvenciones por taquilla son bienaventuradas y a la vez paniaguadas. Los dirigentes habituales se han empeñado en luchar contra molinos, sin percibir que el pan de sus alforjas se estaba poniendo verde.

La ceremonia confirmó que el efecto Buenafuente es mucho más leve que el efecto mariposa. Faltó mala leche, quizás para evitar el efecto Mubarak. Impresionante la lucidez de Pasqual Maragall, R q R Alex de la Iglesia, gracioso el sketch de Pocoyó, planas las parodias de los filmes finalistas. Javier Bardem demostró, con su mezcla de timidez y aplomo, que está en otra liga. Enhorabuena a Villaronga, que ha roto por fin con la maldición/incomprensión de filmes anteriores.


miércoles, 9 de febrero de 2011

Carne de cuadrilátero

Publicado en Diario de Mallorca el 9/2/2011

THE FIGHTER

Nacionalidad: Estados Unidos, 115 min. Director: David O. Rusell
Actores: Mark Whalberg, Christian Bale, Amy Adams, Melissa Leo

Como los toros aquí, el boxeo mantiene su cache literario por la mezcla de violencia, corrupción y ejemplos de superación. The fighter narra una historia real, la del boxeador Micky Ward y su hermano y entrenador Dicky Eklund. Dicky, hiperactivo, dicharachero, tuvo un combate glorioso años ha y después se abandonó a las drogas. Micky, diez años menor, apocado, inseguro, se apoyó en su sabiduría táctica para ganar varios tronos mundiales. Camino obstaculizado por la disipada vida de Dicky y la incapacidad de su madre para evitar combates amañados en perjuicio de Micky.

La historia tiene chicha. El filme, quizás por la excesiva fidelidad a los hechos verídicos, se queda en una extraña tierra de nadie. No alcanza la épica palomitera y circense de Rocky, no pinta un paisaje demoledor como Fat City o Más dura será la caída, y su director no vive un estado de gracia como Scorsese cuando rodó Toro salvaje. Además, el conflicto de personalidades se traslada a los personajes y actores: en la primera parte, Dicky/Bale se comen innecesariamente el protagonismo de Micky/Whalberg. Cuando éste lo recupera, se asienta la película. Se hace más previsible pero alcanza un buen equilibrio entre historia ejemplar, ventana al mísero ambiente de su barrio de origen y drama familiar. Detrás de la cámara, David O. Rusell afina el ritmo, dosifica los combates y se excede un poco con los apoyos musicales. Los actores brillan a gran altura, superlativo Bale, comedido Whalberg, creíble Adams y sutil Melissa Leo. La mezcla de redención y superación, el poso real y el reparto confirman a The fighter como carne de Oscars. Merecidos, sean premios o el consuelo de las nominaciones.

martes, 8 de febrero de 2011

Resacón en Comillas

Publicado en Diario de Mallorca el 8/2/2011

PRIMOS

Nacionalidad: España, 98 min.
Director: Daniel Sánchez-Arévalo
Actores: Quim Gutiérrez, Raúl Arévalo, Clara Lago, Antonio de la Torre

Escena 1: Quim Gutierrez vestido de chaqué en altar religioso cuenta, a una invisible audiencia, que su novia le ha plantado y (ella) se ha olvidado de informar a sus invitados. Abre plano. El ala derecha de la iglesia repleta de gente, la izquierda vacía. Escena 2: Los testigos del enlace, empapados de sacro vino, incitan al desgraciado a fugarse al pueblecito costero de su infancia.

Tras un magnífico drama (Azuloscurocasinegro) y un ambicioso pero algo desconcertante dramedia sobre la bulimia (Gordos), Daniel Sánchez-Arévalo prueba la comedia clasica, veraniega, relajante. La elección es legítima. El talento y la sensibilidad del cineasta se mantienen: diálogos afilados, gotas justas de drama (la trama del alcoholizado Antonio de la Torre con su hija), cuca localización en la localidad cántabra de Comillas, satinada fotografía de Juan Carlos Gómez y luminosa música de Julio de la Rosa.

Todo correcto, demasiado. La película es amena y deja buen sabor de boca. Poco más. La premisa argumental (plantón nupcial y farra terapéutica) está demasiado trillada, le falta un giro de rosca novedoso. Igual que a los personajes. De Diego sólo sabemos que es tierno y enamoradizo, y Quim Gutiérrez abusa de sus tics cómicos. Julián (Raúl Arévalo) no escapa al cliché de machito ibérico. Con José Miguel hay un clamoroso fallo de casting. Su personaje da juego; Adrian Lastra no cuela, físicamente, como ex paracaidista. Inma Cuesta y Clara Lago logran levantar sus planos personajes. Eterno dilema de los creadores, pasarse de largo por exceso de ambición o caer en la indulgencia intentando no cometer fallos. Aún así Sánchez-Arévalo sigue siendo uno de los mejores directores de la última hornada. Y Primos una más que digna comedia.

jueves, 3 de febrero de 2011

La trompeta nacional

Publicado en el suplemento Bellver de Diario de Mallorca el 3/2/2011

(1) Los Globos de Oro vuelven a dar pistas sobre los inminentes Oscars. Triunfo absoluto de La red social, previsibles los de Colin Firth y Natalie Portman, presumible el de Paul Gianmatti. Se aprecia el encaje de bolillos de siempre: a similar calidad, se premia la novedad o se saldan deudas pendientes. Los damnificados (los hermanos Coen, Jeff Bridges, Javier Bardem) esperan un golpe de suerte o a que la rueda de las modas vuelva a detenerse ante ellos.

(2) Gane muchos o pocos Oscars, David Fincher sigue trabajando y va filtrando novedades de su próximo proyecto, Los hombres que no amaban a las mujeres, con estreno previsto para final de año. Extraña ese remake siendo tan reciente la película sueca sobre el mismo título. Perplejidad relativa: c) Las novelas han llegado tarde al mercado americano y ahora se venden al peso, a toneladas, como hace un par de años en Europa. d) Su argumento es muy del gusto de Fincher: personajes atormentados, violencia, venganzas... e) El guionista es Steven Zaillian (La lista de Schindler) y promete un final completamente distinto. f) Reparto potente, Daniel Craig (James Bond) en cabeza, acompañado por Rooney Mara (la rubia que dió calabazas al protagonista de La red social), Robin Wright y Cristopher Plummer.

(3) Pa negre arrasa, ahora, en los cines mallorquines. Facebook en los mercados financieros (a pesar de, o gracias a que Mark Zuckerberg renegó del retrato que le hizo la película). Stieg Larsson en las librerías (cada vez más virtuales) de Estados Unidos. Película, web y novelas han pasado del boca a boca al efecto llamada, el gregarismo cultural, estar en la onda, ver y que se sepa que se ha visto, sentirse parte del grupo, de la tribu. No es una crítica, sólo un apunte antropológico. La evolución antirrevolucionaria del paseo dominical de antaño.

(4) Berlanga se estará partiendo de risa; Francisco de Goya estará bosquejando una nueva serie de aguafuertes, Groucho Marx reclamando derechos de autor. La Academia de Cine se ha mudado a Ca'n Boum. Cuanto más leo y escucho, menos me entero de lo que está pasando. Goleada de los internautas en el primer tiempo. Sonrisas y lágrimas al mismo tiempo, porque Agustí Villaronga, Alex de la Iglesia (e Icíar Bollaín en menor medida) han puesto todo su talento en el asador, y sus premios quedarán apagados por el jaleo verbenero.


miércoles, 2 de febrero de 2011

La dama del lago

Publicado en Diario de Mallorca el 2/2/2011

UNCLE BOONMEE RECUERDA SUS VIDAS

Nacionalidad: Tailandia, 114 min. Director: Apichatpong Weerasethakul. Actores: Thanapat Saisaymar, Jenjra Pongpass, Sagda Kaewbuadee

Un hombre mayor, enfermo renal agudo, se marcha al campo para, en compañía de una hermana, un sobrino y un enfermero, esperar el retiro definitivo. Durante la cena de su primera noche se aparecen su difunta mujer y su hijo transformado en hombre mono. En los días posteriores pasean por el campo, se inserta una leyenda de una princesa seducida por un pez en un lago, visitan una cueva, Boonmee muere y celebran su funeral.

Durante casi dos horas, la acción de Uncle Boonmee... es mínima: largas miradas, diálogos insulsos, cortes de escena imprevisibles y actores claramente no profesionales. Y sin embargo hay momentos en que uno siente un extraño cosquilleo, imposible de racionalizar. Una mezcla de curiosidad, incertidumbre y misterio provocadas por el candor del protagonista, la naturalidad del hombre mono, la determinación de la princesa, los secretos de la cueva o lo kitsch del funeral... El mensaje, de haber alguno, sería la esencia budista de la permeabilidad existencial, nuestra insustancialidad y al mismo tiempo, o por ello, pervivencia temporal más allá de nuestro nacimiento y muerte.

Es difícil valorar si la Palma de Oro en Cannes para este filme fue una boutade para llamar la atención de los medios, un guiño para animar a los cineastas de países lejanos o si fue realmente la obra más destacada. Original lo es, tiene momentos que recuerdan a obras maestras del cine más clásico y está cargada de un profundo simbolismo y referencias a leyendas locales. Y es a la vez un reto para los espectadores, por su estructura narrativa deslavazada y una cadencia, parafraseando a Gene Hackman, equiparable a ver secarse la pintura de un cuadro.