MICMACS
Nacionalidad: Francia, 105 min. Director: Jena Pierre Jeunet. Actores: Dany Boon, Yolande Moureau, Dominic Pinon.
Tercera colaboración de Jean Pierre Jeunet (Delicatessen, Alien 3) con el guionista Guillaume Laurant. El argumento de Micmacs combina el surrealismo costumbrista de Delicatessen y Amelie con una trama de denuncia sociopolítica contra inescrupulosos traficantes de armas occidentales: Bazil (Danny Boon) pierde a su padre intentando desactivar una mina antipersona y, años después, recibe una bala perdida de un atraco. Salva la vida pero pierde el trabajo y es acogido por un grupo de estrafalarios y habilidosos indigentes. Bazil descubre que las dos municiones que han arruinado su vida son originarias de sendos y rivales fabricantes franceses. Con la ayuda de sus traviesos amigos urde un plan para provocar un enfrentamiento entre ambos empresarios y airear su falta de escrúpulos.El planteamiento es loable; no cuaja del todo por la falta de finura en el diseño del protagonista. El surrealismo exige mucha imaginación; la denuncia, verosimilitud. Un hombre que era un empleadillo de un videoclub, tras sobrevivir a un balazo en la frente desarrolla de repente una inteligencia excepcional para engañar a dos poderosísimos capitalistas. Es una transición demasiado brusca o mal explicada. Salvo eso, la película ofrece elementos muy originales tanto de guión como de dirección, como la colección de piezas escatológicas de prohombres, los sueños del protagonista, las habilidades mímicas de Boon, la ternura de la matrona y la contorsionista, o una envenenadísima puya contra Sarkozy. En el reparto, dos grandes comediantes, Dany Boon (Bienvenidos al norte) y Domic Pinon, alter ego de Jeunet; arropados por sólidos o coloristas actores. Micmacs no alcanza el nivel de Amelie, pero mantiene destellos de la genialidad de su director.
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