Publicado en Diario de Mallorca el 10/8/10
AIRBENDER. EL ULTIMO GUERRERO
Nacionalidad: Estados Unidos, 103 min. Director: M. Night Shyamalan
Actores: Dev Patel, Jackson Rathbone, Cliff Curtis, Shaun Tob
La serie televisiva que ha dado pie a este filme se llamaba Avatar, término capitalizado y vampirizado posteriormente por James Cameron. El argumento de Airbender es una secuela más de las historias fantásticas planteadas por Tolkien y C.S. Lewis, con la única aportación de un difuso espiritualismo hindo-budista y artes marciales aplicadas a magia naturista. Hay dos bandos, buenos (dominadores del aire y el agua) y malos (fuego). En este bando hay un disidente, el defenestrado hijo de su máximo dirigente. Entre los buenos sólo una leve sombra de redención en el pequeño buda protagonista; el resto son una inane banda de palmeros. El desinterés es creciente: conflictos obvios y previsibles con personajes simples y diálogos ramplones dejan una sensación de falta de conflicto. Y de originalidad: lo de hacer volar mamíferos gigantes aburre ya; la batalla final recuerda demasiado a Las dos Torres de la saga del anillo; los niños se les intenta entretener con los numeritos de magia blanca; a los adultos con frases de manual de autoayuda como “Todas las batallas se ganan con el corazón” o “El agua nos enseña a ser agradecidos”. En el reparto sorprende la ausencia de actores de renombre, limitándose al protagonista de Slumdog millionaire. Y los que hay, muestran escaso talento.
En un producto tan precocinado era incierto el toque personal del director de El sexto sentido o El incidente. Yo no lo he visto por ningún lado, abrigando sospechas de una jugarreta de marketing de los productores y un lucrativo respiro para el cuestionado cineasta. Airbender es un ameno espectáculo infantil, poco más.
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